miércoles, 30 de agosto de 2017

Algo está pasando hoy

Yo no creo en los milagros, pero a ver si hoy suceden...

Mi vida esta mutando en formas inexploradas, y la que fui no seré nunca jamás.

Para bien, para mal, ya no soy la misma y eso un poco me asusta.

Tengo tantas inseguridades que no dejo brotar por miedo de que se transformen en una catarata de vulnerabilidades.

No tengo coherencia ni hilo en mis pensamientos, en mis ideas, en mi forma de encarar pasos sencillos.

No tengo control de mi cuerpo, ni interno, ni externo, no me pertenece.

Me siento mal, tengo tanto miedo al fracaso, a perder, a no cumplir con las expectativas.


Pero así y todo, con lo que detallo arriba estoy feliz, tan feliz que me siento por primera vez en la vida idiota, una idiotez que me dibuja una sonrisa cuando no lo espero, cuando acabo de sentirme espantosamente frágil. Me da un poder y una impunidad para ser yo misma que jamás he tenido.

Hago planes que deshago en dos segundos y puedo hacerlo, no lo sufro.

Me siento muy distinta a la que era hace poco, no mejor ni peor pero sí espantosamente primitiva, en una jungla que acecha día a día mi fugaz equilibrio físico y mental. Y en esa lucha diaria con uñas, dientes, rugidos y demás armas me siento fuerte, capaz, plena.

Y de  nuevo soy feliz, y luego frágil, y luego vulnerable, expectante, mínima ante la inmensidad del todo.

Y así voy dejando mi coraza de acidez y escepticismo...
Y YO NO CREO EN LOS MILAGROS, PERO A VER SI HOY SUCEDEN.

No hay comentarios:

Publicar un comentario